Catorce millones de empleos en la UE y capacidad extraordinaria de resistencia a la crisis
Entre las principales conclusiones del estudio destaca que la economía social emplea a más de 14 millones de personas en la UE, el 6,5% del empleo total. En España, la economía social genera 1,2 millones de empleos directos, lo que equivale al 6,74% del empleo total del país, porcentaje algo por encima del europeo.
Asimismo, entre las conclusiones figura también que durante el período 2008-2012, la economía social “ha demostrado una capacidad extraordinaria” para hacer frente a las consecuencias negativas del actual ciclo de depresión y contribuir de forma significativa a las tres principales prioridades de la Estrategia Europea 2020: un crecimiento inteligente, sostenible e integrador. Y añade: “La innovación organizativa y social de las empresas de la economía social se encuentra entre las razones básicas de su mayor resistencia a la destrucción de los puestos de trabajo y la inseguridad laboral.”
La economía social en el diálogo social: un desafío de gran calado
Por todo ello, según recoge el estudio, el reconocimiento de la economía social como interlocutor específico en el diálogo social “constituye un desafío de gran calado”. Según los autores: “La economía social se ha convertido en una importante institución de la sociedad civil que contribuye de forma significativa a su vertebración y al desarrollo de la democracia participativa. Pero al mismo tiempo, constituye un poderoso actor económico y social cuyas características específicas no se ajustan a la clásica dicotomía de empleadores – empleados”. Así, el estudio indica que junto a las clásicas Mesas de negociación colectiva, “deben proponerse Mesas de diálogo social, más acordes con el nuevo escenario económico, en las que se incluya a los agentes de la Economía Social”.
En palabras de Luca Jahier, presidente del Grupo de Actividades Diversas del CESE, “sin duda, la economía social constituye un sector que contribuye de manera significativa a la creación de empleo, al crecimiento sostenible y a una distribución de la renta y la riqueza más justa. Se trata de un sector capaz de combinar la rentabilidad con la inclusión social y los sistemas democráticos de gobernanza, que trabaja junto con los sectores público y privado para ajustar los servicios a las necesidades. Fundamentalmente, es un sector que ha capeado la crisis económica mucho mejor que otros y que gana un reconocimiento cada vez mayor a nivel europeo.”
Para consultar y/o descargar el Informe, pulsa aquí: La Economía social en Europa 2013